Atractivos
Iglesia de San Bartolomé
Este templo barroco fue construido entre los siglos XVII-XVIII en sustitución a la antigua iglesia primitiva de la que ya había constancia en 1210. La construcción del edificio duró varias épocas, ya que se tuvo que adaptar un nuevo espacio, La Plaza, y las viviendas y edificios del alrededor tuvieron que abrir nuevas puertas y ventanas que dieran a la nueva plaza. Todavía se conservan algunos elementos de la antigua iglesia que fueron recuperados en las fachadas laterales. En una de las piedras de la fachada principal aparece la fecha de 1726, posiblemente el año de finalización. De la decoración interior los elementos más destacables son los lienzos de los cuatro Padres de la Iglesia que están pintados al óleo y pegados sobre el muro. Las consecuencias de la Guerra Civil española provocaron que desapareciera gran parte del patrimonio y tesoros artísticos como los retablos del altar mayor y el de la Virgen del Rosario, que fueron arrancados y quemados en la plaza. También se vaciaron las tumbas y se abrieron unos boquetes en las paredes para hacer ventanas y utilizar la iglesia como almacén. Todavía hoy en día se pueden apreciar estos boquetes que, tras la guerra, fueron tapiados con cemento. El órgano del coro, la campana y la escultura de San Bartolomé que se encontraba en la hornacina de la fachada principal, también fueron derribados. Esta hornacina permaneció vacía hasta 1973, año en el que, tras un encargo efectuado por el Ayuntamiento a un escultor de Zaragoza, se instaló la nueva imagen de San Bartolomé.
El Ayuntamiento
Como se puede apreciar en una de sus ventanas, la fecha de construcción de este edificio data de 1595. Anteriormente, la fachada principal del edificio se ubicaba enfrente de la Presoneta, pero a partir del siglo XVIII, con la creación de la nueva plaza de la Constitución, el Ayuntamiento cambió su entrada principal enfrente de la Iglesia. A pesar de que se han llevado a cabo numerosas rehabilitaciones, el edificio todavía conserva algunos elementos que pertenecen a la construcción original. Se cree que los bajos de la Lonja albergaron, años atrás, la mazmorra; y las dependencias del Ayuntamiento han albergado diversos servicios públicos a lo largo de los años como las antiguas escuelas, el consultorio médico y el teléfono público. Algunas historias de sus pobladores aseguran que el consistorio fue incendiado en diversas ocasiones debido a las Guerras Carlistas del siglo XIX. Con la proclamación de la revolución anarcosindicalista en 1933, se llevó a cabo la quema archivos municipales en la plaza del municipio, lo que produjo una gran pérdida de documentos de la población.
El puente de piedra
El puente de piedra de Beceite fue construido entre los siglos XV y XVI, coincidiendo con el crecimiento de la población y la formación de los nuevos barrios de Vilanova, Sant Roc y del Pilar. Para llegar hasta el municipio es obligatorio atravesar este puente, ya que es la única vía de acceso a Beceite. La construcción de este puente, de unos 15 metros de altura, permitió que la población no quedase incomunicada en caso de fuertes riadas. Tras la Guerra Civil, la poza que se encontraba bajo el puente fue vaciada con la intención de recuperar las armas que se habían lanzado en su interior durante la Guerra y así aprovechar el hierro.
Molino papelero antigua Fábrica Noguera
Anteriormente, la Antigua Fábrica Noguera era conocida como Fábrica Miró y según información que recopiló el párroco Joaquín Liedana en el siglo XIX, la fábrica empezó su actividad a mediados del siglo XVIII. Fue después de la Guerra Civil cuando la familia Noguera comenzó su actividad papelera en el municipio de Beceite. Primero alquilaron la fábrica de papel de Taragaña y en 1940 compraron la fábrica Miró y, más tarde, también compraron la de Taragaña. En 1954 se abrió un nuevo periodo para esta fábrica con la implementación de una nueva actividad basada en el cuero aglomerado. Seis años más tarde, nació la firma Industrias del Cuero Artificial, S.L. y en 1968 absorbió el resto de la producción de papel y cartulina del complejo. Después de 200 años finalizaba la época de la industria papelera en el municipio de Beceite con el cierre, en 1978, del complejo industrial de la familia Noguera, la última fábrica en cerrar. Décadas más tarde, en el año 2001, el edificio fue reconvertido en un centro cultural, convirtiéndose en la galería de arte Antigua Fábrica Noguera. En la actualidad, la galería de arte se ha convertido en sala de exposiciones, ya que tras el fallecimiento de la artista Gema Noguera, la familia decidió donar el uso al Ayuntamiento de Beceite.
Ermita Santa Anna
Anteriormente, la Antigua Fábrica Noguera era conocida como Fábrica Miró y según información que recopiló el párroco Joaquín Liedana en el siglo XIX, la fábrica empezó su actividad a mediados del siglo XVIII. Fue después de la Guerra Civil cuando la familia Noguera comenzó su actividad papelera en el municipio de Beceite. Primero alquilaron la fábrica de papel de Taragaña y en 1940 compraron la fábrica Miró y, más tarde, también compraron la de Taragaña. En 1954 se abrió un nuevo periodo para esta fábrica con la implementación de una nueva actividad basada en el cuero aglomerado. Seis años más tarde, nació la firma Industrias del Cuero Artificial, S.L. y en 1968 absorbió el resto de la producción de papel y cartulina del complejo. Después de 200 años finalizaba la época de la industria papelera en el municipio de Beceite con el cierre, en 1978, del complejo industrial de la familia Noguera, la última fábrica en cerrar. Décadas más tarde, en el año 2001, el edificio fue reconvertido en un centro cultural, convirtiéndose en la galería de arte Antigua Fábrica Noguera. En la actualidad, la galería de arte se ha convertido en sala de exposiciones, ya que tras el fallecimiento de la artista Gema Noguera, la familia decidió donar el uso al Ayuntamiento de Beceite.
Calvario
Se cree que el calvario de Beceite fue construido en el siglo XVIII, aunque en 1940 se llevó a cabo una reconstrucción que dejó el calvario tal y como lo conocemos actualmente. Desde la puerta del conjunto se puede coger el sendero que lleva hasta la Ermita de Santa Bárbara. A lo largo del recorrido se pasa por las catorce estaciones, que tienen forma de pilones coronados por una cruz y están decorados con baldosas pintadas con motivos de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Actualmente se mantiene la tradición de la procesión del Santo Entierro del Viernes Santo. Antiguamente durante los domingos de la cuaresma se llevaba a cabo una procesión que salía de la iglesia y se rezaba el Vía Crucis. Hasta la Guerra Civil, esta procesión también pasaba por el Calvario, la cruz de término del Molinar y la de la plaza de la ermita de Santa Ana.
El Palau
El Palau de Beceite fue la antigua residencia del arzobispo de Zaragoza, señor de estas tierras. Antiguamente Beceite formó parte de una tenencia en la que también se encontraban Valderrobres, Fuentespalda, Torre del Compte y Mazaleón. El Palau era una obra que ocupaba la parte alta de la población frente a las eras comunales y estaba flanqueado por dos torreones. Dentro del Palau los arzobispos de Zaragoza se encargaban de cobrar los diezmos y primicias en especies. Durante los siglos XVIII y XIX las desamortizaciones del estado sobre los bienes eclesiásticos provocaron que los edificios y terrenos pasaran a manos privadas o públicas, como el caso de El Palau. A lo largo del siglo XX el edificio tuvo diversas funciones como la sede de la Sociedad de Socorros Mutuos, baile, cine, teatro, bar, entre otros. Las salas del edificio se aprovechan para la realización de clases y exposiciones de fotografía y pintura. Actualmente, el edificio original está dividido en tres partes, dos privadas y una municipal, que es la sede de la Asociación Cultural del Palau.
La presoneta y la Botera
La presoneta de Beceite era un torreón que defendía el portal de entrada, actualmente desaparecido. Este espacio era el acceso principal al antiguo castillo árabe-cristiano de la población. Enfrente de la presoneta encontramos otra torre defensiva denominada La Torreta. Entre los siglos XVII y XIX este torreón perdió su función defensiva y se convirtió en una cárcel, sobre todo durante la Primera Guerra Carlista. El general carlista Cabrera encerró a tres mujeres de liberales como reprimenda al fusilamiento de su madre; dos fueron fusiladas y la otra logró la libertad gracias a las súplicas de su padre. En la década de los ochenta y noventa del siglo pasado, el edificio se convirtió en peña de fiestas y en la Oficina de Turismo. Actualmente la presoneta se ha convertido en el Centro de Visitantes. En Beceite se le conoce como el barrio de la Botera.
Portal de San Gregorio
El Portal de San Gregorio es la antigua entrada a la población árabe Bassait y la cristiana Bezeyt del siglo VIII al XIV. El viejo camino de Valderrobres pasaba por el Collet de les Forques, la Font del Pas y por Els Estiradors y llegaba hasta este portal. Se cree que a mediados del siglo XIV el portal fue reformado. En Beceite se conserva la gran mayoría de los portales que seguían el antiguo alineamiento de las murallas del siglo XVI: El portal de Vilanova, el de Sant Gregori, el de Carrau, el de Sant Roc, el del Coll o del Pilar y el pasaje de Vilanova.